Vacunación gripe Andalucía

La campaña de vacunación ante la gripe culmina en Andalucía con más de 1,8 millones de dosis administradas

El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento  de los datos de la campaña de vacunación 2023-2024 frente a la gripe en Andalucía, que adelantó este año su inicio al 9 de octubre y se ha prorrogado hasta el 4 de marzo, y que ha culminado con más de 1,8 millones de dosis administradas, lo que convierte a esta campaña en la tercera con más dosis administradas de la historia de Andalucía. Además, según el informe presentado por la Consejería de Salud y Consumo, el aprovechamiento de las vacunas frente a la gripe contratadas ha sido óptimo, en tanto que se han administrado y registrado el 92,5% de las dosis disponibles esta campaña.

La cobertura final de la vacunación antigripal infantil ha alcanzado el 45,5%, un porcentaje similar al logrado en la campaña anterior, la primera que incorporaba a esta cohorte de edad. En concreto, 132.983 menores entre seis y 59 meses de edad han recibido la dosis correspondiente, siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, debido a la importante carga de enfermedad y al papel tan relevante en la transmisión del virus por parte de los niños al resto de la comunidad.

Destaca especialmente la vacunación contra la gripe entre las embarazadas, que ha alcanzado una cobertura récord en Andalucía con el 82,2% de mujeres embarazadas vacunadas. El año pasado se alcanzó un porcentaje del 81,3%. Asimismo, se han vacunado contra la gripe 1.184.195 personas de 60 años o más de edad, 12.213 personas más que en la campaña anterior, lo que supone una cobertura del 57,9% de la población en esta franja de edad.

En relación con personas de 65 años o más, la cobertura ha sido de un 65,6%, frente al 70,6% logrado el año pasado. El descenso registrado en la vacunación antigripal en los andaluces mayores de 65 años es una tendencia que se ha observado también a nivel nacional en la campaña 2023- 2024. Esta situación puede atribuirse a una percepción de riesgo menor en la población de los virus respiratorios y a un ‘cansancio vacunal’ tras la situación de alerta sanitaria por el Covid-19, según ha detallado la Junta.

Entre las personas institucionalizadas internas en centro residenciales y con personas con discapacidad, la cobertura de vacunación antigripal ha alcanzado el 90,7%.

Durante la campaña 2023-2024 en Andalucía, han recibido la vacuna de la gripe 55.626 profesionales sanitarios y sociosanitarios (cobertura del 42%) y 30.827 la dosis de recuerdo de Covid-19 adaptada (cobertura del 23,3%).

La vacunación antigripal ha descendido ocho puntos aproximadamente respecto a la campaña anterior, confirmándose la tendencia descendente que se está apreciando en las dos últimas campañas, reflejo del mayor control de la pandemia Covid-19 e, igualmente, de cierta ‘fatiga vacunal’ observada entre los profesionales.

La campaña, que ha durado 21 semanas, ha transcurrido sin incidencias destacables, ya que no ha habido problemas de suministro ni estocaje de dosis.

El 72,4% de los vacunados recibieron la dosis en las ocho primeras semanas de la campaña, es decir, antes del 1 de diciembre de 2023, dato importante porque se estimaba que la temporada de gripe podría sufrir un adelanto en su aparición, como finalmente ocurrió.

Esta campaña estaba dirigida fundamentalmente a proteger a las personas que tienen un mayor riesgo de presentar complicaciones en caso de padecer la gripe, como son las personas institucionalizadas internas en centros residenciales y en centros de discapacidad y las personas a partir de 60 años, y a las que pueden transmitir la infección a éstos, como los profesionales sanitarios y sociosanitarios, y los convivientes. Además, se recomendó vacunar a las personas que, por su ocupación, proporcionan servicios esenciales en la comunidad y a personas con exposición laboral a virus aviares o porcinos.

El objetivo era proteger a las personas más vulnerables a la gripe, disminuyendo lo máximo posible la incidencia de gripe en estos grupos diana y contribuyendo a reducir el impacto sobre la presión asistencial.

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